jueves, 5 de noviembre de 2009

¡LOS BOMBARDEROS DEL BRONX ESTÁN DE VUELTA EN 2009! ¿QUIÉN ES SU PADRE?



Ayer, en una serie de campeonato que se postergó seis juegos, finalmente se coronaron los Yanquis de Nueva York, después de nueve años de sequía, la última vez que llegaron a la final y la ganaron fue en 2000, contra los Mets, siempre mencionados en las novelas de Paul Auster y también siempre perdedores.

 De la mano de Alex Rodríguez, Texeira, Jeter, Damon, Matsui, CC Sabathia, Mariano Rivera, entre otros, los bombarderos del Bronx, equipo histórico del beisbol y el más famoso en el mundo en cuanto a juegos de conjunto se refiere, al que veneraban Henry y Arthur Miller, el de los amantes de Marilyn Monroe, el del inmortal Babe Ruth y el de los grandes jugadores Mantis, Maris y Reggie Jackson, consiguió su banderín número 27, para beneplácito de millones de seguidores, especialmente el mío.

 ¿Cuántos litros de cerveza habré consumido en esas tardes-noches viendo sus partidos, en los que se dejaban superar en el marcador para venir de atrás y ganar, la mayoría de las veces justo en la novena entrada, imprimiéndole dramatismo al asunto? Imposible cuantificarlos, pero qué chingón se derramaron por mi garganta y, en ocasiones, por mi franela rayada original que me ponía para ver en acción a los “malditos mulos del Bonx”, como los llaman sus enemigos, que también son un chingo.

Bueno, ya sólo falta que los Rayados del Monterrey hagan algo importante en la liguilla del futbol mexicano para que este maldito año del diablo, gracias a los infames de Carstens y Calderón, termine con algunas alegrías al estilo romano, por aquello del circo y pan para el pueblo jodido. Sea así. Simón, soy un enajenado, ¿algún pedo? 


miércoles, 4 de noviembre de 2009

DRENAJE PROFUNDO, UNO

Al son de "Los senos son para el sexo, no para amamantar", Nicola McLean privó de sus tetas a su ¡propio hijo en edad de amamantar! La modelo cabildeó con sabiduría qué era lo que más convenía, si darle de comer al pinche chamaco, con nombre de perro, Rocky, o que el barragán de su amante las disfrutara con diligencia. Por supuesto que ganó la segunda opción, para el bien de la santa lujuria y de las etapas orales que no ha podido superar su afortunada pareja. Así que ya le pueden ir buscando una chiva a Rocky para que le dé de comer, o péguenlo a las chiches de una perra callejera para que no muera de inanición. ¡Hacen falta más mujeres de esa calaña en este mundo! Adjunto fotos en las que Nicola muestra sus ésas, a las que con gran tino considera "mis herramientas de trabajo".